Castillos de cuento a 1 euro
Comprar castillos a un euro, ¿por qué?
No todo son beneficios cuando compras un inmueble, estos tienen asociados una serie de gastos que no siempre son tan evidentes. De hecho, si es tu primera compra seguramente no sepas que la adquisición de una propiedad conlleva a el pago de impuesto y si procede, de los correspondientes gastos hipotecarios.
En cuanto la vivienda sea tuya, te verás obligado a hacer frente a otros costes, como por ejemplo los de reformas o mantenimiento. Tal y como el refrán dice, no todo lo que reluce es oro, así que antes de comprar un castillo de cuento, hay que ser consciente de que, probablemente conlleve grandes costes de mantenimiento.
Por este motivo hay propietarios de castillos que deciden ponerlos a la venta. El gasto que conlleva mantener construcciones con tantas habitaciones, dependencias y jardines es desmesurado. Para poder mantener estas propiedades en condiciones hay que gastar millones de euros todos los años. Y esto no todos los bolsillos pueden soportarlo.
¿Quién quiere comprar castillos a un euro?
La respuesta es nadie. Comprar castillos a un euro no es una gran oferta. Por otro lado, venderlos no es nada fácil, porque no todo el mundo puede soportar económicamente lo grandes costes que comporta la conservación de estos. Para expedirlas, los compradores tienen que demostrar que tienen recursos para mantener la propiedad e incluso presentar proyectos para promover su conservación.
Los propietarios no son privilegiados. La mayor parte de edificaciones están protegidas por leyes de conservación histórica, de modo que, para deshacerse de ellas, sus propietarios están obligados a pedir autorizaciones.
Para expedirlas, los compradores tienen que demostrar que tienen recursos para mantener la propiedad e incluso presentar proyectos para promover su conservación.
¿Qué castillos se han vendido por 1 euro?
A continuación, te contamos la historia de dos castillos que se han comercializado por un euro.
Por un lado, el Castillo de Marienburg, en Alemania y, por otro, el Castillo de Kinloch, en Escocia.
¿Qué tipo de compradores se buscaban para la venta de estos inmuebles a un euro?
El Castillo de Marienburg:
El Castillo de Marienburg, ubicado en la baja Sajonia, Alemania, fue construido entre el 1858 y el 1867. Se trataba de la residencia oficial de la dinastía Hannover, la que, actualmente, era propiedad del príncipe heredero, Ernst August de Hannover. Este joven de 35 años pudo mantener el castillo, propio de un cuento de hadas.
El príncipe Ernst tuvo que aceptar vender el castillo por el precio simbólico de 1 euro. Según los expertos, se calcula que el coste de mantenimiento asciende a los 30 millones de euros. Finalmente apareció un comprador, pero tardó. Tal y como hemos mencionado anteriormente, la mayor parte de edificaciones están protegidas por leyes de conservación histórica.
El príncipe debía pedir autorización a las autoridades de Hannover, ya que se trataba de un inmueble protegido por la ley de conservación histórica y, además, el propietario debía comprometerse a mantenerlo y a renovarlo. Actualmente, el propietario del Castillo de Marienburg es la empresa Llemak Inmobilien, que cumplió con los requisitos exigidos para poder adquirir esta propiedad.
El Castillo continúa abierto al público. Anualmente, atrae a unos 200.000 turistas. Por supuesto, el príncipe podrá acceder de forma gratuita a su interior y usarlo para organizar eventos o celebraciones sin tener que alquilar el espacio.
El Castillo de Kinloch
El pasado mes la noticia era protagonista en todos los medios europeos: un castillo escocés del siglo XIX se puso en venta por el módico precio de una libra esterlina, unos 1,18 euros. Este es el Castillo de Kinloch, que se encuentra en la isla de Rùm, en Escocia.
El bajo precio de venta de este castillo se debe a las numerosas reparaciones que requiere para su mantenimiento. Se calcula que se necesitan unos 23 millones de euros para reparar este castillo. Como es obvio, el castillo no se puso en venta en el mercado abierto, ya que los actuales propietarios necesitaban que el comprador demostrara que contaba con los recursos suficientes para encargarse de la rehabilitación del castillo.
Se trata de uno de los castillos más llamativos de toda Escocia, y es que este ha sido el escenario de fiestas de lujo a las que asistió en varias ocasiones el rey Eduardo VII del Reino Unido (1901-1910). La isla de Rùm es famosa por su caza y pesca, aristócratas de toda Inglaterra se alojaban en el castillo escoces.
Esta vivienda, que contiene numerosas habitaciones decoradas con esculturas y obras de arte, es especial y única entre los castillos europeos. Se encuentra el último orquestrión en funcionamiento del mundo. Esta es una compleja máquina musical, que perteneció a la reina Victoria y que emula una orquesta de 40 músicos.
