Las caracteráÂsticas principales del estilo nórdico
La característica principal de este estilo es el predominio del color blanco. Utilízalo como color principal de todas las habitaciones, por ejemplo en las paredes y en los muebles con más peso, como pueden ser el sofá, los armarios o las sillas.
Como color secundario, introduce muebles de madera. Estos aportarán un toque natural y mucho más acogedor que se suplementará muy bien con el blanco.
Para complementar estos dos tonos principales, incorpora un tercer color y juega con sus tonalidades. Elementos como los objetos de decoración, las mantas, los cuadros o la vajilla, son perfectos porque los puedes cambiar según la época de año. También puedes añadir objetos textiles con estampados geométricos monocromáticos como los cojines, alfombras, sábanas o manteles.
Si quieres integrar alguna pieza más especial, inspírate en los ciervos. Es uno de los animales más característicos de este estilo. Podrás encontrar-lo des del diseño más realista al más minimal en objetos de decoración, que complementaran cualquier rincón.
Debes tener en cuenta que el estilo nórdico se define por líneas rectas y el minimalismo. De modo que no recargues los espacios con demasiadas cosas. De esta manera, conseguirás un ambiente muy tranquilo a nivel visual.
Añade plantas para dar un toque natural y elegante. Las plantas verdes son las que mas casan con este estilo. Su color uniforme no romperá la armonía de los otros colores que ya hemos introducido.
Estas son las características principales del estilo nórdico pero lo puedes adaptar a los muebles que ya tienes y a la vez a tu propio estilo. Solo recordar-te que en esta tendencia: ¡Menos es más!
